Uno de los enemigos de una sonrisa perfecta son las manchas en los dientes, una coloración en el esmalte que se produce debido a diversos factores como, por ejemplo, el consumo excesivo de sustancias con agentes colorantes o el consumo de alimentos ácidos. Estos últimos no generan tinciones por sí mismos, pero afectan estructuralmente al diente y provocan que sea más susceptible a sufrir los efectos del consumo de productos que sí tiñen los dientes.
Frutos rojos
Los frutos rojos como los arándanos, las moras y las granadas contienen pigmentos oscuros que pueden dejar residuos en los dientes. «No hay que descartarlos, ya que tienen una gran cantidad de antioxidantes, pero es importante que no olvidemos cepillarse correctamente los dientes tras su ingesta», apunta la odontóloga.
Salsa de tomate
La salsa de tomate es una preparación que, además de contener un color altamente pigmentado, también es ácida, lo que puede ablandar la capa de esmaltado de los dientes y hacerlos más porosos y susceptibles a las manchas, según explica la experta.
Remolacha
La alta pigmentación de la remolacha hará que se oscurezcan los dientes. Para evitarlo, no hay que olvidarse de un buen cepillado después de consumirla.
Refrescos
Los colorantes de los refrescos también pueden afectar al esmalte dental. Un consejo para que su impacto sea menor será utilizar una pajita par aque el contacto de la bebida con los dientes sea menor.
Café y te
Terminar las comidas con un café o un té suele ser una práctica habitual, pero lo cierto es que hay que tener en cuenta que ambos contienen taninos, lo que favorecerá la apariencia más oscura de la dentadura. Además, pueden alterar el equilibrio de la flora bacteriana y favorecen la formación de placas de sarro. «Mezclarlos con leche minimizará su efecto», asegura la odontóloga de Sanitas Dental.
FUENTE: https://www.abc.es